Una low cost pública reemplaza a la 'huida' Ryanair en Ucrania

Ryanair pactó con Ucrania abrir bases en el país. Aquello desató una fiebre en la población, que creía que iba a ver el final de los precios altos, sobre todo en los vuelos interiores. Hasta que finalmente, visto que no se cumplían sus exigencias, la irlandesa se largó diciendo que el país no está suficientemente maduro para negociar y comprometerse con una aerolínea extranjera. El primer ministro salió al día siguiente a los medios a decir que negociaría, pero las cosas no han terminado de ir por donde se esperaba. Entonces, el consejo de ministros de Ucrania decidió crear su propia aerolínea low-cost, con precios realmente bajos. Tenía razón O'Leary: aún queda mucho para que en ese país se entienda qué es el mundo del negocio.

No se ha mencionado el nombre, pero si que el ministerio de Infraestructuras anunció a la sociedad los precios que tendrán los vuelos en la low-cost pública. Y, por supuesto, el gobierno proclama que esa compañía aérea sí beneficiará a los ciudadanos ordinarios.

Las informaciones indican que el gobierno pretende que la nueva aerolínea de bajo coste opere ya el año que viene. Como si imaginan, el magnate propietario de Ucranian International Airlines, que actualmente controla el mercado, no debe de estar muy preocupado por la iniciativa pública.