Aena y Abertis: paz en los aeropuertos de México

La sociedad a través de la cual Abertis, Aena y su socio local CMA tienen el control estratégico de Grupo Aeroportuario del Pacífico (GAP) ha recuperado la paz interna, según publica Expansión.

En un comunicado remitido al regulador de la bolsa de México, los tres socios, que participan a partes iguales en GAP a través de Aeropuertos Mexicanos del Pacífico (AMP), renuncian a continuar con el cruce de demandas en los tribunales y a tomar todas las decisiones de la empresa "por consenso".

Como gesto de buena voluntad, Abertis y Aena han cedido para que la presidencia de GAP recaiga en un representante de CMA. "Entre las acciones acordadas para normalizar las actividades dentro de AMP y de GAP, se hará una convocatoria para celebrar una asamblea general de accionistas de GAP en la que se propondrá la presidencia sea retomada por el socio estratégico mexicano CMA", dice el acuerdo.

AMP es el socio estratégico de GAP con el 15% desde 1999, fecha de la firma del contrato de concesión para la explotación de los 12 aeropuertos que componen el grupo aeroportuario privado más grande del país.

La batalla interna en GAP vivió momentos de alta tensión y estuvo a punto de llegar hasta la Corte Internacional de Arbitraje. CMA llegó a pedir la salida forzosa de Aena.

GAP transporta más de 20 millones de pasajeros al año. Su facturación ronda los 200 millones de euros, con un resultado bruto de explotación (ebitda) de 129 millones. La compañía cotiza desde 2006 en la bolsa de México y de Nueva York, con una capitalización próxima a los 2.000 millones de dólares.

En el documento al regulador, Abertis, Aena y CMA añaden que "se comprometen a implementar nuevas reglas de participación, convivencia y gestión en relación con su participación en GAP, así como a la defensa de la posición que la Secretaría de Comunicaciones y Transportes confirió a AMP como socio estratégico de GAP".

Este punto se puede interpretar como una toma de posición común contra la amenaza sobre el control de GAP tras la opa lanzada este año por Grupo México y su socio Inbursa (Carlos Slim), que se encuentra paralizada por el regulador bursátil. Grupo México comenzó a comprar acciones de GAP en 2010 aprovechándose del conflicto entre accionistas. A través de dos sociedades, Grupo México, propiedad del magnate Germán Larrea, tiene más del 30% de las acciones B (sin derechos políticos) de GAP.