Acto inédito el que tuvo lugar en Cerdeña. Una mujer se encontraba de vacaciones en la isla italiana y acudió a un restaurante, donde compró una langosta de un kilo por, nada más y nada menos, que 200 euros.
Hasta aquí todo normal. Muchos establecimientos permiten al cliente elegir el producto antes de ser cocinado por si tienen alguna preferencia. Ocurre tanto con la carne como con el marisco, como es este caso.
Pero la sorpresa llegó cuando la mujer salió a la terraza del restaurante con el crustáceo dentro de un cubo. Tras estar varios segundos acariciándola, tomó la decisión de arrojarla al mar, aparentemente, como un nuevo acto en favor de los animales.
Las opiniones han sido muy diversas en redes sociales. Algunos comentarios del clip que acompaña a esta publicación, difundido por El Mundo son: “Maravilloso gesto de Amor por la Vida. Noble acción la de respetar la vida de otro ser vivo que merece la misma oportunidad que nosotros defendemos”.
En cambio, otros internautas se muestran muy críticos con su actuación: “Pero que tontería…que compre una granja de cerdos”; “Ojalá mostrarais el mismo interés en defender a los bebés en gestación”
Lo que tienen que hacer algunos para tener sus 15 minutos de fama.
Seguro que los 200 euros no se los ha ganado currando.como cualquier hijo de vecino, otro gallo cantaría si hubiera sido así.
Ojalá pudiera preguntarle, los motivos que le impulsaron a llevar a cabo este acto.
Si era por los 15 minutos de fama, salir en la foto y parecer muy guay, me parece muy acertado.
Si era por algún motivo altruista para salvar a la langosta de las fauces de turista desalmados, le diría que, esas langostas vienen de cultivo, son poco más que lechugas andantes.
Le diría que liberarla es condenarla a la muerte, tal vez mucho más atroz que la de acabar en una cazuela. Sería como agarrar a una persona que no ha salido en su vida de una ciudad y ponerla en lo más profundo del Amazonas sin ningún tipo de conocimiento para su supervivencia.
¿Cuál es la diferencia entre acabar de comida de turista o comida de pulpo, mero o cualquier otro depredador o carroñero marino?.
Ojalá pudiera preguntarle, los motivos que le impulsaron a llevar a cabo este acto.
Si era por los 15 minutos de fama, salir en la foto y parecer muy guay, me parece muy acertado.
Si era por algún motivo altruista para salvar a la langosta de las fauces de turista desalmados, le diría que, esas langostas vienen de cultivo, son poco más que lechugas andantes.
Le diría que liberarla es condenarla a la muerte, tal vez mucho más atroz que la de acabar en una cazuela. Sería como agarrar a una persona que no ha salido en su vida de una ciudad y ponerla en lo más profundo del Amazonas sin ningún tipo de conocimiento para su supervivencia.
¿Cuál es la diferencia entre acabar de comida de turista o comida de pulpo, mero o cualquier otro depredador o carroñero marino?.