¿Para quién edificamos?

Un estudio de una consultora británica, que publica preferente en su edición digital, demuestra que, por primera vez en la historia, el motivo más frecuente por el que los extranjeros compran segundas residencias en el Mediterráneo no es para pasar sus vacaciones sino para alquilar a través de los portales al uso.

Es decir: edificamos y edificamos para que los extranjeros compren y después alquilen a sus compatriotas.

Obviamente, el asunto suscita muchas preguntas que no estaría de más que nos formuláramos: ¿es sostenible que nuestro territorio se destine a este fin? ¿Tiene algo que ver esto con el turismo tradicional? ¿Nos conviene este negocio?

Personalmente pienso que nadie con capacidad para reconducir la situación va a hacerse ni estas ni ninguna otra pregunta. Seguiremos creciendo, seguiremos construyendo, seguiremos vendiendo hasta que pueda llegar una nueva burbuja.

Todo esto, como es obvio, es competencia para la industria hotelera que, por supuesto, no debe tener ningún privilegio sobre el alquiler de los particulares, excepto que los hoteles crean empleo mientras que esta actividad detectada en los estudios de esta consultora apenas supone salarios.

Quizás en algunas zonas de España esto sea interesante, pero en cualquier caso, sin reflexionar no deberíamos dejar que este negocio se expanda como si nada.