Antonio Catalán enoja a las autoridades socialistas y ecosoberanistas

Antonio Catalán forma parte del reducido grupo de empresarios del sector turístico español que obvian a los jefes de marketing, a los personal manager, a los directores de comunicación y a tutti quanti ejercen de asesores de imagen de los presidentes y  dueños de las empresas turísticas.

Catalán no los necesita porque es un marketiniano en estado puro: se basta él solo para promocionarse y para promocionar, por ende, todo lo que lleva entre manos, que no es poco después de su alianza con Marriott, que le sirvió de salvavidas de AC y de espita para nuevos proyectos.

El fundador de NH es un vendedor nato, desde que se peina hasta que se coloca el pijama, y , sin ofertar crecepelos como los que aparecían en las películas de los primeros westerns, sabe sacar provecho de los sitios que pisa, incluso de aquellos que en teoría le producen grima, como las zonas de sol y playa.

En su última visita a Mallorca, donde acudió a un foro y recibir un premio -distinción que generó cierta controversia en determinados ambientes empresariales porque el pamplonica apenas si cuenta con un pequeño hotel- “vendió” que iba a pujar por la explotación del Palacio de Congresos.

Pero a última hora el dueño de AC ha dicho que donde dije digo, digo Diego, o sea, que no, dejando solos a los dos gigantes locales, Meliá y Barceló, y al hormiguita gallego Amancio López, por lo que los Escarrer y los Barceló se las verán con el íntimo de Rajoy en vez de con el íntimo de Zapatero…

Las autoridades palmesanas se las prometían muy felices cuando tuvieron constancia del interés de Catalán por el Palacio -el exsecretario de Estado Joan Mesquida, huésped en Madrid del dueño de AC, habría sido su consejero en esta operación- dado que el tercero en liza era socio de Marriott.

Las razones por las que el presidente de AC Marriott se ha retirado de la puja sólo las sabe él y probablemente su amigo Mesquida, pero lo que sí es cierto es que el día que vino a Palma a recibir su premio se reunió con Simón Pedro Barceló, antes de la fiesta que organizó en su casa de Andratx con altos próceres socialistas.

El enojo de las autoridades socialistas y ecosoberanistas del ayuntamiento palmesano fue grande cuando supieron que AC se retiraba, después de que anunciara su interés en Ultima Hora por competir con Meliá y Barceló, siempre presente en los medios, siempre con el autobombo.