Arman Aria y su hijo Arad tenían pensado realizar un viaje para celebrar el cumpleaños del pequeño, junto a su familia y amigos, aunque la sorpresa no fue precisamente una gran fiesta. Madre e hijo se tuvieron que quedar dos días atrapados en Irán debido al error ortográfico de un agente de viajes.
El agente de ‘Plan-It With Pam Holidays’ en Richmond, escribió de forma incorrecta el segundo apellido del niño en los billetes de avión y no lo corrigió cuando la madre le alertó del fallo, ya que, según el agente, “era un error sin importancia”. Tras dos días de calvario, la familia al fin pudo regresar a su destino de origen.
Más le vale al agente contar con un buen seguro, se lo van a comer vivo con la demanda.