Catástrofe en Mallorca: dos turistas entre los 10 muertos

Al menos diez personas han muerto y un niño está desaparecido en Sant Llorenç des Cardassar, a 60 kilómetros de Palma, en la comarca de Levante de Mallorca, por las intensas lluvias de hasta 220 litros por metro cuadrado en sólo seis horas que provocaron el desbordamiento de dos torrentes que dejaron anegada la localidad. De los  fallecidos dos son turistas británicos que viajaban en taxi y que se vieron sorprendidos por la riada. Los fallecidos se han encontrado en las localidades de Sant Llorenç, Artà y S'Illot. El Gobierno balear ha activado un número para los damnificados, el 900 600 112.

Durante la tarde de este miércoles han sido encontradas tres de las cinco personas que estaban desaparecidas. Consiguieron salvar la vida ya que se refugiaron en la antigua estación de tren del municipio. Los servicios de emergencias siguen buscando a un niño que ha desaparecido durante las fuertes lluvias.

Las intensas lluvias desbordaron el torrente de Ses Planes que inundó el municipio de Sant Llorenç des Cardassar, de unos 8 mil habitantes. Centenares de vecinos quedaron atrapados en sus casas. Más de 200 personas tuvieron que ser evacuadas y realojadas en los polideportivos Miquel Ángel Nadal y Na Capellera de Manacor y Es Pinaró de Son Servera. Decenas de conductores quedaron aislados en carreteras próximas a Manacor y Son Servera.

Unas cincuenta personas han pasado la noche en la academia de Rafa Nadal, Rafa Nadal Sports Centre, que también funciona como hotel, que abrió sus instalaciones a los afectados por las inundaciones. El propio tenista Rafa Nadal ha brindado sus instalaciones para que los desplazados por la riada puedan pasar la noche hasta que puedan volver a su casa. El deportista mallorquín, además, ha participado como uno más en la limpieza de las calles de Sant Llorenç, como muestra las imágenes que se han difundido en las redes sociales.

La Federación Hotelera de Mallorca se ha puesto a disposición del Gobierno balear para ayudar en lo necesario en las labores de los equipos de emergencias, sanitarios y ha ofrecido alojamiento, avituallamiento y apoyo logístico para familias y efectivos que están trabajando en las zonas afectadas. 

Gabriel Nebot, presidente de la Asociación Hotelera de Cala Millor, se ha mostrado consternado por la magnitud de la tragedia y ha ofrecido las instalaciones hoteleras al Ayuntamiento de Sant Llorenç y a la Guardia Civil para acoger damnificados por la riada. En las últimas horas han llegado a la isla un centenar de militares de la Unidad Militar de Emergencias, ocho vehículos, tres helicópteros y tres perros de rastreo para ayudar en las tareas de rescate.

Gabriel Nebot dice que la noche ha sido caótica en la zona y que todavía están digiriendo la tragedia. Asegura que algunos empleados que se encontraban trabajando en hoteles de Cala Bona han tenido que dormir  en el propio hotel ante la imposibilidad de volver a sus casas en Portocristo por el gran número de carreteras cortadas. Los hoteleros dicen que la noche ha sido muy angustiosa porque las líneas de teléfono no funcionaban y no podían comunicarse con sus familiares y allegados. El presidente de la Asociación Hotelera de Cala Millor deja en segundo plano las inundaciones sufridas en la planta hotelera de la zona por la tromba de agua.

Meliá Hotels International ha ofrecido sus hoteles en Calas de Mallorca: Sol Cala Antena, Sol Calas de Mallorca y Sol Mirador de Calas, para alojar temporalmente a los damnificados por las inundaciones. El Grupo hotelero lamenta la catástrofe y se une así a otras empresas y particulares que han ofrecido su solidaridad ante las consecuencias de la terrible inundación de ayer.

El Govern balear decretará 3 días de duelo y pedirá al Gobierno central la declaración de zona catastrófica. El ejecutivo autonómico celebrará un Consell de Govern extraordinario esta tarde a las 17.00 horas para decretar esos 3 días de duelo y hacer la petición al Gobierno.

"Nuestro pensamiento está con las víctimas y familiares", ha informado el Govern en un comunicado en el que transmite además su fuerza y su apoyo a las 350 personas que forman parte del operativo de rescate.

Las intensas lluvias registradas anoche en Mallorca obligaron al aeropuerto de Son Sant Joan a activar la regulación entre las 14 y las 22 horas del martes. Debido a la meteorología adversa los despegues y aterrizajes se espaciaron para poder operar con mayor seguridad. Únicamente, según fuentes de AENA, se produjo una cancelación de un vuelo entre Palma y Barcelona. A pesar de las inclemencias meteorológicas el aeropuerto de Palma asegura que el 70% de los vuelos operó con puntualidad.