“No hay alternativa”, Alitalia será una compañía aérea 'low cost' en Europa

Tras meses y meses de idas y venidas, Cramer Ball, el director ejecutivo de Alitalia, presentó ayer el plan industrial de la que fuera compañía de referencia en Italia, Alitalia. El plan para 2017-2022 prevé reinventarse como una compañía low cost y, por el camino, despedir a 2.000 trabajadores.

Con toda probabilidad los bancos que son propietarios del 51 por ciento, más Etihad, la aerolínea de Abu Dhabi dueña del 49 por ciento, estarán dispuestos a aceptar el plan y pondrán el dinero –o los avales– que den liquidez a la compañía.

El plan fue aprobado en una reunión que duró seis horas. Prevé la reducción de los costes en mil millones de euros anuales y un aumento de la facturación del 30 por ciento de cara a 2019. Aún no se ha hablado con los sindicatos, pero estos, por mucho que se enfurezcan, tienen poco margen de maniobra. “No hay alternativa” es el mensaje de la dirección.

En cierto modo, Alitalia tendrá dos velocidades: una pura 'low cost' en Europa y una compañía normal en el largo radio, potenciando los vuelos trasatlánticos.

Como 'low cost', el plan es que los aviones en el corto y medio radio vuelen mucho más, y con más pasajeros –menos espacio entre asientos–. La flota se reducirá en 20 aviones –ya hace unos días, al tiempo que se anunciaba el abandono de Reggio Calabria como destino, se informaba de la paralización de 20 Airbus 320–, se cobrará por el servicio de bar a bordo, se cobrará por la elección de asiento, por facturar maletas y por embarcar antes. Se potenciará Milán Linate como base, especialmente para los enlaces a Cerdeña y Sicilia.

Una  Ryanair o Easyjet pero con lo colores italianos. En el largo radio, se mantiene el servicio completo. Se reconfigurarán todos los Airbus 330 y se revisará el entretenimiento en los Boeing 777. Aumentarán los vuelos a América, pero no habrá grandes cambios.