Nace una aerolínea cristiana

Una organización religiosa de Estados Unidos está preparada el lanzamiento comercial de la primera aerolínea cristiana del mundo. Judah 1. La nueva compañía le llevará a los cielos tanto en el sentido metafórico como en el real. La aerolínea tendrá sede en el estado de Louisiana. Los inversores esperan obtener la certificación de la Administración Federal de Aviación el próximo año y comenzar a operar como una aerolínea de pleno derecho durante 2021. 

Hay que matizar: Judah 1 ya existe, aunque no vende sus asientos al público. Tiene algunos aviones para el uso privado de la iglesia cristiana a la que pertenece. Lo que pretenden hacer es convertir esos aviones, añadir otros, y abrirse como una aerolínea comercial, para lo que sí tienen que pedir licencias. El proyecto inicial es añadir más aviones grandes a la flota existente, que ya consta de algunos aparatos importantes. Los promotores, en una muestra de cierta desconexión con el mercado, indican que los viajeros principalmente serán misioneros. 

Judah 1 dice que hoy opera privadamente cinco aviones y que en un año pretende tener tres o cuatro aviones grandes más. “A partir de ayer hemos agregado a nuestra flota un Boeing 767-200ER. Tiene capacidad para 238 personas y puede ir a cualquier parte del mundo con una sola parada. Lleva 30 toneladas de carga”, dijo Everett Aaron, el presidente de la compañía, quien hizo el anuncio en el periódico Christian Post, el cual acabó la noticia pidiendo a los lectores que recen por el éxito de la aerolínea.

Judah 1 explica que ha transportado hasta ahora "cientos de misioneros y transportado miles de libras de carga" en todo el mundo. "Es muy gratificante saber que ya hemos ayudado a mucha gente”. "Esto incluye a los miles que han sido atendidos en clínicas médicas y los miles que han aceptado a Jesús como Señor y Salvador”, explicó Aaron, en un lenguaje nunca oído en el mundo del transporte aéreo.

Judah 1 operará de manera diferente a las aerolíneas regulares: no funcionará en un horario normal y no se limitará a las rutas aprobadas, sino que volará “a donde queramos cuando queramos, a diferencia de la mayoría de las aerolíneas. No tenemos que hacer eso". A los misioneros se les cobrará un pasaje aéreo, pero no hay cargos por equipaje o carga.

Aaron explicó que un día vio muchos aviones “llenos de comida, suministros médicos, Biblias... Se encendieron los motores y estaban listos para funcionar. Había gente alineada frente a estos aviones lista para subirse a ellos, pero no se subían a los aviones. Le pregunté a Dios ‘¿por qué esta gente no en los aviones, ¿pueden salir al campo misional?’ Y Dios dijo, 'no pueden ir al campo misional hasta que no consigas los aviones ... esto es lo que te estoy llamando a hacer".

Esta es la inusual forma de nacer de una aerolínea.