Islas Afortunadas Air, Aerocanarias, Victoria Airways, Bird Blue, ... Cada cierto tiempo se anuncia el inminente aterrizaje de aerolíneas de nuevo cuño que prometen servicio de primera, tarifas competitivas y copar un mercado que en muchas ocasiones está necesitado de más conexiones, especialmente en los casos insulares. Pero tras los grandes titulares, los anuncios y la creación de perfiles en redes sociales, de los vuelos no se sabe nada. Los ejemplos en los últimos tiempos son numerosos.
Canarias ha sido campo de pruebas de varias aerolíneas que no terminan de despegar. Es el caso de Islas Afortunadas Air, una compañía de capital 100 por cien canario, cuya idea era comenzar a operar en otoño de 2013 y llevar a cabo vuelos interinsulares, nacionales e internacionales. La compañía iba a tener una flota inicial compuesta por 12 aviones BAE 146 y dos Airbus A320, con una plantilla de 400 empleados, que en su primer año de funcionamiento preveía a 3,5 millones de pasajeros. A día de hoy, y tras borrar casi por completo su rastro en Internet, la aerolínea sigue siendo un proyecto sin fecha concreta de despegue.
Tampoco se ha sabido mucho más de Aerocanarias, que por las mismas fechas anunciaba su puesta en marcha. También con capital canario, una inversión prevista de 40 millones de euros y una flota compuesta por aviones Embraer ERJ170, Airbus A320 y Airbus A330. En abril de 2013 ya anunciaba programación “en las próximas fechas”, mientras esperaba el AOC y los permisos europeos. Su intención era la de romper el monopolio en los vuelos interislas a base de reactores. A medio plazo se había planteado contar con vuelos a países escandinavos y Sudamérica pero, lamentablemente, aún no ha desplegado sus alas.
Otro proyecto canario que tampoco ha llegado a ver la luz es Bird Blue Air Line, que también se había propuesto resolver los problemas de conectividad aérea entre Canarias y el resto de España. Preveía conectar Canarias con Madrid, Barcelona y Santiago de Compostela gracias a una flota de ATR-72 alquilados y un Boeing.
En el otro archipiélago también hay ejemplos de compañías que iban a ser y finalmente no fueron. Victoria International Airways es una de ellas. El proyecto impulsado por empresarios de Málaga y Mallorca se ha quedado en stand by tras varios años después de no haber conseguido un avión con el que iniciar operaciones.
Menorca tampoco quería ser menos y también iba a contar con su propia aerolínea. Dos veteranos emprendedores (Mariano Bendito y Lorenzo Moll) presentaron el proyecto en septiembre de 2013 y planteaban alquilar cuatro aviones, un turbohélice y cuatro reactores. La inversión prevista era de 10 millones de euros, de los que la idea era que el 49% fuese aportado por la Administración. Con una plantilla prevista de 115 personas, en régimen de autónomos, iba a operar vuelos interislas, además de conectar Menorca con Madrid y Barcelona, con Europa en el horizonte. Un plazo que ahora parece mucho más largo, visto el nulo movimiento de la compañía hasta ahora.
En el caso de la aragonesa Air Horizont, no llegó a volar pero sí vendió 4.000 pasajes, con la promesa de la devolución de los importes. Su idea ahora es reenfocarse como chárter. La que sí despegó pero que acabó dejando a más de 500 pasajeros en la estacada es Leon Air, con base en el Aeropuerto de Burgos.
Aún recuerdo Hispania Airwyas en Granada que nos estafó unos cuantos miles de euros y aún seguimos sin saber nada. He perdido algunos clientes por estos impresentables.
Experimentos: CON GASEOSA
Lo de Air Horizont y el conocido como PUMOCO es muy fuerte, su experiencia anterior en compañías que ya no existen pero que han dejado una larga lista de impagados y supuestamente estafados es su reciente historia, con ese currículum muy lejos no se puede llegar. Hay gente de la extintas Girjet y Pronair que si se lo encuentran no creo que le den besitos precisamente. Hay que tener memoria para estas cosas, es como el caso de alguien que escribe artículos de opinión en esta web, parece que el pobre no ha roto un plato, y tiene una historia muy conocida que de vez en cuando es preciso recordar para que algunas cosas no se vuelvan a repetir.
Islas Afortunadas Air se sabía que era un bluf desde el principio. La forma de promocionarse, las cosas que prometían. Estaba claro que era mentira. ¿Lo mejor? Ver como se esconden los que tanto la defendían.
Pumoco es el culpable, jajajajaja