South African Airways (SAA), la aerolínea de bandera de Sudáfrica, está al borde de la quiebra y probablemente dejará de pagar los salarios de los trabajadores en horas, según han informado los medios de comunicación locales.
El Gobierno ha hecho pública una declaración en la que indica que la aerolínea necesita un rescate urgente de unos 55 millones de euros para poder seguir operando, aunque no para resolver su crisis.
El principal accionista de SAA es el gobierno sudafricano, que acumula ejemplos de mala gestión en su haber.
Las fuentes financieras informaban ayer que, incluso en el caso de que se inyectar el dinero requerido, lo único que se conseguiría es que para el mes de diciembre se volvieran a repetir los problemas, dada la incapacidad de la compañía para generar flujo de caja positivos.
La aerolínea estatal sudafricana perdió dinero en cada uno de los últimos siete ejercicios, con lo que la acumulación de números rojos es insoportable. El Tesoro de Sudáfrica este mismo año había inyectado 140 millones de euros adicionales para permitir el pago de un crédito bancario que, si fuera ejecutado, habría supuesto anticipar el cierre de la compañía.
El ministro de Finanzas ha declarado que la compañía pidió una aportación de capital de 600 millones de euros en el pasado mes de marzo, de forma que reorganizar sus finanzas. Se prevé que el gobierno responda a esa petición en el próximo mes de octubre, si es que para entonces aun está operativa la compañía.
Mientras, los sindicatos tienen convocados paros y protestas a partir de mañana, tanto en el aeropuerto como ante la sede de la compañía.
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QUISIERON GOBERNAR Y AHORA LO TIENEN
Esta compañia ha sido siempre un ejemplo de desastre de gestion, disparidad de flotas y de rutas, no han sabido competir con otras grandes aerolineas en rutas internacionales ni domesticas con la filosofia de que por el hecho de ser estatal sus compatriotas volarian con ellos. La gestion estatal en este mercado es muy complicada, y te puedes pillar las manos con cualquier decision. Esperemos que sean capaces de levantar la cabeza y que en manos privadas (si llega) pongan orden.