Estos días, Ryanair está firmando acuerdos con su personal de cabina en varias bases europeas, aceptando que estos se rijan por las leyes nacionales de los países de residencia y no por las de Irlanda. Pero Ryanair no lo tiene fácil porque estos acuerdos son ilegales en Irlanda: la ley de ese país obliga a que las compañías aéreas irlandesas retengan los impuestos a los trabajadores que no vivan en el país, siempre que el avión en el que trabajen esté matriculado en Irlanda (Ryanair acepta la jurisdicción laboral local y cierra acuerdos en toda Europa).
Los acuerdos que Ryanair está firmando son, pues, ilegales en Irlanda, lo que abre otro problema para la compañía. Sin embargo, Ryanair ha desatado una campaña de presión contra las autoridades fiscales de su país porque parece que esta vez sí está decidida a aceptar las reivindicaciones de sus trabajadores. En estos momentos, Ryanair tiene ya firmados acuerdos en Alemania, Bélgica y Portugal, reconociendo que a sus trabajadores de los aviones se les aplique la legislación nacional de los países en los que se encuentran las bases, como ha venido revelando preferente.com (Ryanair acepta también en Portugal que su personal se rija por leyes locales).
Ryanair tiene en estos momentos 85 bases fuera de las Islas Británicas, en las cuales ha habido problemas con los trabajadores porque hasta ahora todos ellos estaban trabajando para la jurisdicción irlandesa y ahora empiezan a estar contratados por la legislación nacional de cada país. Pero la ley irlandesa impide estos acuerdos al obligar a Ryanair a retener dinero para entregar a la Hacienda de Dublín.
Este lunes 3 de diciembre, la compañía presentó una reclamación en la Corte Comercial, exigiendo un cambio de la ley. Pero fuentes oficiales han indicado que se opondrán a este extremo, al menos impidiendo que este asunto se resuelva rápidamente.
Ryanair ha dicho al ministerio de Finanzas, cuyo titular es Pascal Donohue, que cambie la ley y pide provisionalmente que se exhima a sus trabajadores en el extranjero de esta medida, aunque hasta el momento sus pretensiones han sido rechazadas.
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Los tratados internacionales, firmados por todos los paises de la UE, lo dejan muy pero que muy claro: la matricula del avion define su nacionalidad.
O sea que quien trabaja o se encuentra en un avion con matricula de un pais, esta trabajando en ese pais. Al menos parece que los irlandeses lo tienen muy claro. Aunque solo sea porque les va el dinero en eso.
El problema lo tenemos los ciudadanos europeos que vemos como compañias con matriculas, ya no del pais sino extracomunitarias, operan aprovechandose de derechos de ciudadanos europeos y dejando los beneficios fuera.
O ya mas cercano vemos como alguna empresa española contrata trabajadores extracomunitarios para trabajar en aviones con matricula española.
Y ya si vamos mas alla podemos ver como a dia de hoy y gracias a un tal cascos, cada avion con matricula española en espacio aereo internacional no tiene a bordo ninguna persona que represente al estado, porque ese individuo antes mentado se encargo de hacerla desaparecer de la ley.
Llegado el caso los afectados ya se las verian en los tribunales. Ahora le toca a Ryan.
Todo porque vivimos unos momentos en los que prima el populismo y los politicos son unos iletrados que de lo unico que se preocupan es de su paguita cueste lo que le cueste al pais
Que listos los irlandeses, los impuestos si, los derechos no...bajas médicas, maternidad etc...a ver si aprenden los gobiernos españoles del trato que reciben los de aquí por allá fuera