IAG descarta subir el precio por Norwegian

El consejero delegado de IAG, Willie Walsh, que integra a Iberia y British Airways, ha reiterado en la junta de accionistas del grupo aéreo, como recogen varios medios, que "permanecemos abiertos respecto a Norwegian, pero no es una operación que tengamos que llevar a cabo y no participaremos en una batalla de ofertas".

En abril, IAG anunció que había comprado un 4,61% de su rival escandinavo con el objetivo de iniciar conversaciones con Norwegian, incluyendo la posibilidad de lanzar una oferta sobre el 100% de la compañía, en dificultades financieras por el agresivo crecimiento de los últimos años para hacer despegar el segmento de los vuelos de largo radio de bajo coste.

En mayo, IAG confirmó que habia contactado con el consejo de administración de Norwegian y que no había alcanzado un acuerdo, aunque desmintió la versión de la escandinava, que por su parte aseguró que había recibido dos ofertas no vinculantes de IAG que había rechazado porque infravaloraban a la compañía y sus perspectivas de futuro, y además, ha señalado que ha recibido otras muestras de interés como la de Ryanair, que también la ha negado, como recogió preferente.com (Ryanair se suma a IAG en afirmar que Norwegian se inventa negociaciones de compra).

Walsh ha apuntado que "nuestra flexibilidad como grupo nos permite ser dinámicos y aprovechar la consolidación cuando surgen nuevas oportunidades". Y citó como ejemplo la compra de derechos de vuelo (slots) en el aeropuerto británico de Gatwick tras la quiebra de Monarch en 2017. No obstante, un objetivo del interés de IAG por Norwegian es evitar que la acabe comprando Lufthansa, aunque esta ha afirmado que no le interesa.

Entretanto, la desconfianza en Norwegian Air Shuttle se acentúa por parte de los inversores. Así lo asegura el diario Hispanidad. La aerolínea noruega ha perdido un quinto de su capital desde la última semana de abril, cuando sus títulos llegaron a 310 coronas, mientras en la última semana oscilan en las 242 por acción, reflejando un desplome de más del 21 por ciento en mes y medio. Los motivos para la desconfianza son la mezcla de elevado endeudamiento y las pérdidas que venía registrando aún con el petróleo barato (La desconfianza en Norwegian se acentúa al perder un quinto de su capital desde abril):