Elon Musk, como es sabido, además de mandamás de Tesla, tiene una empresa que lanza cohetes al espacio, SpaceX, con la que ha creado una red de satélites que, entre otras cosas, ofrece Starlink, un sistema de telefonía e Internet sin hilos accesible en todo el mundo.
Por eso compite con Amazon y Virgin lanzando cohetes al espacio. Estos lanzamientos son controlados por FAA, la Aviación Civil de Estados Unidos. La FAA hace unos días anunció que imponía una multa de unos seiscientos mil dólares a SpaceX, de Musk.
Pero Musk no se calló y se lanzó contra la burocracia de la FAA: priorizan minucias irrelevantes mientras ignora cómo Boeing ha dejado a los astronautas en la estación espacial por su incapacidad para ofrecer lo que se comprometió.
Como Musk tiene tribunas mediáticas poderosas –es el propietario de la antigua Twitter– su voz se ha oído.
Las multas se deben a que la sala de mandos usada en una misión no estaba autorizada y que no tenía todas las licencias en una operación de 2023. Pero Musk lo niega todo y dice que la FAA gasta su dinero en atacar a SpaceX por minucias mientras hace la vista gorda con Boeing. “En lugar de multar a Boeing por no ser capaz de facilitar el retorno de los astronautas de Nasa, nos multa a nosotros por minucias”. Los astronautas debían de haber regresado a la Tierra en junio y ahora se espera que retornen en febrero, precisamente en una nave espacial de Musk.
El bocachancla lleva razón.
Musk, al igual que le ocurre a Trump es el coco para la administración federal americana y en esta ocasión les señala lo más obvio aunque no les guste. Señores que es un "error" de Boeing que les cuesta 8 meses de su vida a los astronautas! Ninguna tontería.
Es que lo del trato preferente a Boeing por parte de las administraciones es un escándalo. Boeing si a día de hoy sigue viva es debido a las subvenciones estatales que está recibiendo y aún así no da ni una, ya sea en el ambito de la aviación civil, donde sus aviones son escopetas de feria, o ahora que se han embarcado en la exploración espacial, que lanzan una nave con fugas. No se entiende este trato de favor de las administraciones si no es por algún interés de alguien influyente.
El futuro candidato a la presidencia de su país, si se acaban cargando al del pelo blanquecino. Tiene aires, si no vientos, de presidente.