No es sólo que haya un brote de Covid en la sede mundial de Ryanair, que se encuentra en el aeropuerto de Dublín, es que el personal sugiere que la dirección no lo abordó apropiadamente.
El nueve de diciembre pasado hubo un brote de coronavirus en la sede de Ryanair, en Airside Business Park, Dublín. La dirección, según se ha sabido a partir de comunicaciones internas, ordenó a un trabajador que había dado positivo que dijera a las autoridades sanitarias que no tenía contactos con sus compañeros de trabajo directos. Se le dijo al mismo trabajador que si las autoridades le hacían muchas preguntas, que lo derivara al personal de Recursos Humanos. Aparentemente, se trataría de minimizar el impacto de este caso y así evitar que las autoridades paralizaran una parte de la compañía.
La sanidad irlandesa acudió a la sede de Ryanair porque al parecer un gran número de empleados de la compañía presentaba síntomas de Covid. Esto afectaba especialmente a la sala de operaciones de la compañía. Antes de que la sanidad interviniera, los controles de Covid los llevaba a cabo la propia Ryanair.
La prensa de Dublín informaba este domingo que un miembro del personal de la compañía había declarado que “esa sala [de control de operaciones] en particular es como una sala de reuniones. Es grande, pero no hay ventilación, las puertas siempre están cerradas. Incluso el invierno antes de Covid, una persona en la habitación se enfermó y todos nos enfermamos. La ventilación de la habitación es deficiente”. Añadió que sus colegas estaban "asustados" por la cantidad de casos positivos. Un memorando de la empresa enviado a mediados de diciembre informó al personal que "la mayoría de las personas en el área de Operaciones" habían dado negativo.
El personal fue notificado por primera vez de un brote el 9 de diciembre, según muestran las comunicaciones internas. El brote se habría limitado a una sola sala y se siguieron todos los consejos de las autoridades, incluida una limpieza profunda de la oficina, y se organizaron pruebas del personal para el día siguiente. El personal fue informado de un “pequeño número” de casos adicionales en un memorando enviado el 16 de diciembre. El 28 de enero, otro memorando informó al personal que no había habido ningún caso positivo durante más de una semana.
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Una buena parte del personal de líneas aéreas, y especialmente las tripulaciones, hemos estado en contacto con la enfermedad y con cientos de personas al día desde el primer minuto, sin cambiar los protocolos hasta meses después y sin ser considerados grupo de riesgo. Es muy probable que muchos ya lo hayamos pasado el invierno pasado. Que ahora haya un brote en una oficina no parece nada del otro mundo.
El problema son las presiones de la empresa para ocultar información a las autoridades sanitarias y hacer como si nada hubiera pasado.
Yo creo que la noticia va por ese lado, más que por el contagio en sí.
Lamentablemente las tripulaciones están poco cuidadas y estoy de acuerdo en que deberían ser considerados como poco, primera linea.
Donde roban...dan palos...y vosotros siempre fuiesteis complices del maltrato a los pasajeros con prácticas ilegales y no devolviendo el dinero...que cierre ya esta aerolinea
Respuesta a Adam supongo que Drinkman. Que en una oficina se produzca un brote no es importante? Eres un poco clasista?