Brasil recupera la aviación pese a la expansión del virus

Jair Bolsonaro, el presidente de Brasil, es lo más parecido a un negacionista. Pero no parece ser el único en el país. Mientras el virus se expande, su aviación está volviendo a la normalidad, por supuesto porque los viajeros vuelven a volar. Es el ejemplo del país que no está dispuesto a parar por unos miles de muertos por Covid.

Su aviación comercial está teniendo actualmente una de las mejores recuperaciones a nivel mundial. Cerró el año 2020 con una demanda más robusta que en marzo, cuando la pandemia comenzó a paralizar a las aerolíneas sudamericanas. Esta semana, la Asociación de Transporte Aéreo de América Latina y el Caribe (ALTA) publicó algunas estadísticas sobre la industria de la aviación brasileña que indican que hoy hay menos actividad que hace un año, antes de la epidemia, pero mucha más que en marzo, cuando estalló la crisis.

Brasil nunca cerró completamente su espacio aéreo. Permitió un plan de vuelos esquelético nacional y prohibió la entrada de viajeros internacionales durante unos meses. Finalmente, el gobierno brasileño terminó por levantar todas las restricciones. Actualmente, los pasajeros solo deben presentar un resultado negativo de la prueba PCR, y no se permiten vuelos o pasajeros del Reino Unido. Poco a poco, las aerolíneas aumentaron sus capacidades y, a pesar del creciente número de casos de Covid en el país, los brasileños parecían ansiosos por viajar nuevamente. Durante el último trimestre de 2020, las aerolíneas incrementaron significativamente sus operaciones debido a la próxima temporada alta de verano.

Según ALTA, las aerolíneas brasileñas ofrecieron 7,09 millones de asientos a fines de 2020, una disminución del 37 por ciento en comparación con enero. Mientras tanto, la operación internacional sí sigue estancada, con una caída del 75 por ciento.