Barceló y la incierta rentabilidad del patrocinio del COE

Barceló Hotels & Resorts es una de las cuatro grandes empresas que patrocinan al Comité Olímpico Español durante los Juegos Olímpicos de Londres 2012. Aunque no ha trascendido la cantidad invertida por la hotelera en este evento deportivo, algunos expertos dudan de la rentabilidad de este patrocinio a efectos de notoriedad, salvo si se le destina “mucho dinero”.

Expansión recoge este martes la opinión de expertos en este tipo de acciones publicitarias, que señalan que “el objetivo del patrocinio puede no ser la notoriedad”, sino la obtención de “programas VIP de asistencia al evento destinadas a clientes, accionistas, empleados y otros grupos de interés”.

Los profesionales del sector publicitario subrayan que el esfuerzo económico de una empresa en el patrocinio de las Olimpiadas puede quedar diluido por la concurrencia de un enorme número de marcas, algunas de ellas con gran capacidad inversora y alcance global (caso de Coca-Cola o Visa).

Carles Cantó, vicepresidente de la consultora IMG, ha apuntado que la activación, o sea, las acciones que se llevan a cabo para potenciar el apadrinamiento de un evento o un deportista,  es el punto más importante de un patrocinio.

Barceló, junto con los otros tres patrocinadores del COE (BME, Mapfre y la casa de moda rusa Bosco di Ciliegi), están estos días pendientes de los niveles de audiencia que reciba la cadena de televisión pública española, que realiza la cobertura de los Juegos Olímpicos. De la cuota de pantalla que rasque TVE durante la cita olímpica dependerá también parte del éxito de sus patrocinios.

En el ente público se confía en, al menos, repetir los datos de Pekín 2008: un 19% de cuota y más de 36 millones de espectadores. Mucho depende de los resultados deportivos que consigan los participantes españoles en Londres. En China, los deportistas de nuestro país trajeron a casa 18 medallas.