¿Qué está pasando en Globalia? Lo mismo que en El Corte Inglés con la sucesión

"¿Qué está pasando en Globalia?". Es la pregunta que vienen haciendo a preferente.com varios primeros fila del Sector ante la sucesión de noticias de los últimos días, como la dimisión de Pedro Serrahima del cargo de director general; el despido de Antonio Hidalgo como director de Compras, y el anuncio de su padre, Juan Antonio Hidalgo, vicepresidente del Grupo y propietario del 9 por ciento, de que busca comprador a ese paquete (Globalia: Juan Antonio Hidalgo negocia vender su 9%).

¿Qué está pasando en Globalia? ¿Qué puede explicar la sucesión de acontecimientos de este calibre? Quienes conocen bien las altas esferas de la casa apuntan a que la raíz de los problemas, el mar de fondo que en parte los explica, viene de que hay un CEO —Javier Hidalgo— sin acciones, y dos hermanas —María José y Cristina— que tienen cargos que dependen de su consejero delegado, pero que a su vez son dueñas de la empresa de su jefe. Hay dos Globalias que no siguen el mismo rumbo (Globalia: la estrategia y la relación con el trabajador, núcleo de las divergencias).

La situación es casi la idéntica a la que padece El Corte Inglés. Hay un presidente ejecutivo —Dimas Gimeno— elegido por su tío y antecesor en el cargo —Isidoro Álvarez—, pero hay unas dueñas —Marta y Cristina Álvarez— que sin cargos quieren mandar y meterse en la gestión. Hay dos Corte Inglés. Hay uno que quiere modernizarse y ser agresivo con los cambios para adaptarse a la realidad del nuevo cliente, y hay otro que es más conservador, y que tira de la gente de la casa para ascenderlos a puestos de primera fila.

En Globalia, Javier Hidalgo quiere modernizar el grupo y había confiado en profesionales externos como Pedro Serrahima para transformar el 'holding' turístico que más factura. Su visión era alabada por una buena parte de la industria. Dentro de su conglomerado se valoraba que ahora se había arremangado y hacía jornadas de 16 horas. Pero rompió con Chema Hoyos, íntimo de su hermana María José, y se agudizó la distancia. Las Hidalgo Gutiérrez no quieren tantos cambios y prefieren promocionar a los de la casa como Emilio Rivas (Pedro Serrahima: “A mi equipo no le faltará enemigos”).

La historia con Antonio Hidalgo y su padre, Juan Antonio Hidalgo, se enmarca en los bandos que existen en el grupo. Eran cercanos a Serrahima y creían en su proyecto, pero su salida les ha dejado tocados. Hay dos bandos, y dentro de la cúpula un directivo da una orden y otro al mismo tiempo la contraria, depende de a quién sean más cercanos cada uno. Tampoco es una situación muy nueva, pues la interferencia de las hermanas en el grupo habitualmente ha provocado estas dificultades, pero ahora cada día se hace más cuesta arriba (La amistad Serrahima-Javier no se extiende a todo Globalia).

Las reyertas entre la familia han sido la causa común que ha provocado que la mayoría de directivos apreciados haya salido del grupo. El patriarca tomó una decisión, se decantó por el más preparado y considerado, pero a ver quién es capaz de no obedecer a una propietaria. Desde el estallido de la crisis, preferente.com ha venido informando de la sucesión de hechos, así como varios periódicos independientes, pero nunca se había dejado claro cuál era el mar de fondo que en su mayor parte explica lo que está pasando (Las reyertas entre los Hidalgo, causa de la mayoría de ceses).

El grupo se está moviendo. Los directivos fueron convocados este martes en Pozuelo. Se desplazaron desde Mallorca y hoy seguirán con las reuniones en las que se esperan anuncios importantes. Ha quedado vacante la dirección general de Globalia y sigue sin cubrirse la dirección general de Halcón. Los candidatos elegidos mostrarán qué bando gana esta batalla. Las hermanas y dueñas, de momento, se han hecho con la dirección de Compras y se han quitado a un afín a Javier como 'número 2' del grupo (Cristina Hidalgo asume la dirección de Compras de Globalia que deja su primo).

Así, Globalia es muestra de una bicefalia similar a la de El Corte Inglés, que posterga avanzar hacia un solo rumbo definido. Sus patriarcas no han sido ejemplo de clarificar la sucesión de unas casas con modelos que necesitan actualizarse ante la evidente y acentuada contracción de márgenes, y que han tenido un gran control histórico sobre las grandes cabeceras de la prensa que hubieran podido presionar en el sentido de apremiar a las transformaciones de ambos grupos.