La quiebra de Thomas Cook puede dar más de 230 millones a varios 'hedge funds'

Mientras miles de viajeros buscan una forma de regresar a sus países por la quiebra de la agencia de viajes británica Thomas Cook, un grupo de hedge funds (fondos de inversión alternativos o de cobertura) se frota las manos. Gracias a su quiebra, los fondos aspiran a ganar hasta 230 millones de euros en compensación de las aseguradoras, a lo que se suma lo que llevaban meses embolsándose por ventas en corto.

Según relata Bloomberg, un grupo de inversores, entre los que se encuentran Sona Asset Management y XAIA Investment, compraron grandes cantidades de seguros contra quiebra (CDS, Credit Default Swaps, en inglés) en las últimas semanas, lo que en la práctica supone poco menos que una apuesta sobre su bancarrota inminente. El llamado Comité de Determinación, que decide si una empresa quiebra oficialmente, será la encargada de decidir, el próximo lunes, si pagar el dinero en cuestión, lo que parece ya garantizado.

Más polémico es el hecho de que los fondos en cuestión, que aspiraban a hacerse con una gran cantidad de dinero si la empresa quebraba, participaron en las negociaciones sobre su superviviencia. Sona Asset vetó la posibilidad de un rescate de la china Fosun a Thomas Cook por valor de 500 millones, lo que habría dejado sin valor sus CDS. Otra posibilidad, de convertir sus bonos en acciones, también fue rechazada por los inversores.

Pero hay más formas de aprovechar la quiebra de la empresa para ganar dinero, más allá de los CDS. Un 10,7% de las acciones de la empresa estaban vendidas en corto el día antes de la quiebra, una cantidad equivalente a casi 6 millones de euros.

Eso, el viernes pasado. En en último año, las acciones de la empresa cayeron de 61 a 3,45 libras de valor. En ese tiempo, una venta en corto del 10% de sus acciones habría reportado más de 100 millones de euros. Una prueba más de que hasta de los desastres empresariales se puede sacar dinero.