Abierta la frontera, los rusos invaden las costas de Turquía

En abril pasado, debido al Covid –o al menos esta fue la razón oficial– Moscú prohibió todos los vuelos de entrada o de salida de Turquía que, de todos modos, desde finales de 2020 tenían muchos problemas para operar normalmente. Pero ahora, esta misma semana, desde este martes, los rusos tienen permiso para poder volar y los turcos lo celebran con euforia porque desde el primer día hay una entrada masiva de estos turistas, de los que en España sabemos que son de alto poder de gasto.

Turquía, como casi todos los países del Mediterráneo, ha pasado de tener un abril con casi sesenta mil contagios nuevos cada día a un junio con apenas cinco mil, lo cual en parte se debe al millón de vacunas que se aplican al día en el país.

Así que desde este martes, los aviones están entrando en masa. El mismo martes se estimaba que doce mil rusos entrarían sólo en un día, a bordo de 44 aviones, según la agencia de noticias estatal turca, Anadolu. El periódico local, Daily Sabah, sin embargo, hablaba de veintitres mil turistas sólo en un día, aunque probablemente esta cifra se deba a un error en el cómputo de plazas, porque 44 aviones, incluso de doble pasillo, no permiten tantas entradas.

Maya Lomidze, presidenta de la Asociación de Operadores Turísticos de Rusia, dijo que se espera que hasta cinco millones de rusos reserven vacaciones en el extranjero este verano y Turquía sigue siendo un destino popular para ellos. "Turquía será el país líder en las vacaciones en el extranjero de este año", dijo Lomidze en Moscú, donde habló sobre los impactos del virus en el sector turístico. Tras señalar que los vuelos entre Rusia y muchos otros países aún están paralizados, Lomidze dijo que “la gente aprovecha que los vuelos han comenzado a Estambul, desde donde pueden ir a varios destinos".

Turquía ocupó el primer lugar entre los países visitados por ciudadanos rusos por turismo el año pasado con casi 7 millones que llegaron al país, y su principal destino de viaje fue Antalya. La ciudad acogió a más de 5,5 millones de rusos en 2019, lo que representa el 35 por ciento del total de sus visitantes.