La ausencia de turistas está arruinando al país. No sólo son los hoteles ni las aerolíneas. También los productores de tabaco y por supuesto Tabacalera están sufriendo la ausencia de visitantes. En Baleares, por ejemplo, las ventas de tabaco han caído un 59 por ciento, provocando un verdadero problema en toda la cadena de producción.
El consumo de tabaco, por malo que sea para la salud, moviliza al país. De él dependen los agricultores de este sector, dado que España es el tercer país de la UE en producción de hoja de tabaco. Depende la industria, dado que España cuenta con fábricas de tabaco tanto en la Península como en Canarias, siendo el Archipiélago el epicentro de la producción de cigarrillos a nivel nacional. Y dependen también los 12.800 estancos y la red de distribución.
Ahora hagan lo mismo con la cerveza o los helados, para comprender la gravedad de la crisis del turismo, incluso en sectores impensados.
Todo este tejido se ha visto afectado por la falta de turistas en España tras la irrupción del coronavirus. Mientras que la venta de cigarrillos durante el 2020 ha descendido un 8,12% en el conjunto del país, en Baleares cayó un 59 por ciento, en Alicante un 18, en Gerona un 16, en Málaga el 11.
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