Muere el monje budista que salvó Japan Airlines

Con 90 años murió el pasado 24 de agosto Kazuo Inamori, un japonés, monje budista ordenado, empresario admirado por todos, que creó el fabricante de productos electrónicos Kyocera.

Inamori es conocido en el mundo del transporte y la aviación porque cuando tenía 78 años recibió el encargo del Gobierno japonés de abandonar el retiro y tomar las medidas organizativas necesarias para salvar Japan Airlines, entonces en quiebra. De esto hace apenas 12 años. Lo hizo sin cobrar salario alguno.

Inamori, cuando recibió el encargo, dijo que en materia de transporte aéreo él era un "completo amateur". Pero prometió que haría lo mejor de lo que fuera capaz.

En unas memorias sobre su paso por Japan Airlines, Inamori contó que reunió a los trabajadores y que les explicó que “el propósito de los directivos de una renacida Japan Airlines era dar las oportunidades materiales para el crecimiento de todos los empleados. Les repetí esto varias veces. Desde aquí en adelante, les dije, Japan Airlines existe no para el beneficio de los accionistas, tampoco para el interés de los directivos, sino para el crecimiento de los trabajadores. Mi convencimiento personal, mi filosofía de gestión, se introdujo en la renacida Japan Airlines”.

El primer paso de su gestión fue acabar con la burocracia y reorganizar la estructura, en la que todo el mundo tuviera claro ante quien debía de responder.

El cambio en Japan fue absoluto. Inamori, además, explicaba a quien le quisiera escuchar, que su trabajo fue absolutamente altruista y que por ello la Divinidad sintió pena y le dio una mano. “Una recuperación milagrosa como la que vivimos en Japan Airlines no se hubiera podido lograr sin la intervención divina”.