Ley de urbanismo vs. ley turística: o manda el cliente o el que manda es la ley

La batalla entre hoteleros en la industria puede resumirse en dos visiones. La primera, expresada por Aurelio Vázquez, CEO para EMEA de Iberostar, en un foro la pasada semana: "El urbanismo dice: aquí hay un uso residencial, aquí uno turístico. Decir 'cojo lo mejor de los dos mundos' es fenomenal, pero, ¡te estás saltando la ley!”. La segunda, la respuesta del impulsor de Be Mate, Kike Sarasola, que presume sin rubor de juntar lo mejor de los dos mundos para dar respuesta a las necesidades de los huéspedes contemporáneos, pues “el que manda es el cliente”. Por lo tanto, el debate es si en este negocio manda la ley o manda el cliente.

Vázquez cargó contra la plataforma de pisos turísticos BeMate al acusarles de “hacer más daño que Airbnb”, argumentando el respeto a las normas básicas de urbanismo. El directivo de Iberostar no aludió al pago de impuestos o la falta de creación de empleo de este tipo de actividad, sino que afirmó que quien negocia con pisos turísticas “se salta de lleno la normativa urbanística de las ciudades”. A su juicio, los espacios son o residenciales o turísticos, pero nunca pueden ser las dos cosas a la vez.

El también ex presidente de la Fehm afirmó que lo único que trae este tipo de alojamiento es un perfil de turista mochilero, “que gasta lo mínimo, satura las infraestructuras públicas y los recursos naturales de los lugares que visita”, sin generar ningún retorno, más que el pago al dueño del apartamento que está habitando durante sus vacaciones.

En esta línea se había situado tiempo atrás también el vicepresidente de Meliá Hotels, Gabriel Escarrer, quien hace unos meses se manifestó claramente en contra de este tipo de plataformas y criticó la falta de voluntad de las administraciones para hacer frente a este problema creciente (Escarrer: “Airbnb es el mayor riesgo para el Sector a nivel mundial”).

En el lado contrario aparece Kike Sarasola, fundador y presidente de Room Mate, para quien la creación de su plataforma BeMate responde a las peticiones del los clientes. “Tenemos que adaptarnos al futuro”, afirmó tras lograr suscribir un convenio con la confederación de agencias de viajes para fomentar el alquiler de sus viviendas turísticas entre las agencias asociadas (Golpe de las agencias de viajes a los hoteleros apoyando a BeMate).

El empresario celebró la pasada semana con la decisión del Tribunal Superior de Justicia de Madrid (TSJM) de anular el decreto de la Comunidad de Madrid que prohibía alquilar viviendas turísticas por un periodo inferior a cinco días. En su opinión, esta resolución revelaba que “por fin se está actuando con sentido común”, pues definía dicho decreto como “una barbaridad”.

Por su parte, el director de Turismo de la Comunidad de Madrid, Carlos Chaguaceda, también considera que este decreto no tenía sentido, poniéndose del lado de quienes defienden la legitimidad de las plataformas tipo Airbnb. En declaraciones a preferente.com, el titular de Turismo del ejecutivo madrileño, no obstante, sí hizo hincapié en la necesidad de regular este tipo de actividad, pero siendo conscientes de que es una nueva manera de viajar cada vez más demandada.

Chaguaceda dijo a este medio que espera poder lanzar la normativa sobre apartamentos turísticos después del verano, pero adelantó que ésta buscará regular la actividad, sobre todo en lo que concierne al pago de impuestos. Consciente de la carga económica de un alojamiento regulado, consideró que los apartamentos deben existir dentro de la oferta alojativa de las ciudades porque es lo que demandan los turistas, pero siempre que estén registrados y cumplan con la ley vigente.