Thomas Cook pierde un 7'5% menos en su primer semestre

El touroperador británico Thomas Cook mejoró sus resultados en el primer semestre del año fiscal (octubre-marzo), registrando una pérdida operativa de 220 millones de libras (unos 308 millones de euros), lo que supone un 22,2 por ciento menos que el mismo periodo del año anterior.

Todos los indicadores de la compañía han mostrado un comportamiento más favorable, a pesar de seguir en negativo, como por ejemplo la pérdida neta, que cayó un 17 por ciento hasta los 302 millones de libras (unos 422 millones de euros), o la deuda neta, que pasó de 811 a 700 millones de libras (de 1.136 a 980 millones de euros).

Esta mejora en los números de la compañía permitió hoy augurar al touroperador que a término del próximo año fiscal podrá volver a pagar dividendo a sus accionistas, que vieron peligrar la supervivencia del grupo tras la crisis por la que atravesó en 2011.

Las previsiones para el conjunto del año fiscal son buenas, gracias a las positivas perspectivas con las que afrontan el último trimestre (julio-septiembre), que supone el 90 por ciento de sus resultados. De hecho, Thomas Cook asegura haber vendido ya el 62 por ciento de todo el programa estival que presenta, un 2 por ciento más que lo vendido a estas alturas del pasado año fiscal.

El anuncio de los resultados se produce el mismo día en que la compañía ha sido objeto de un intento de boicot por parte de los usuarios de las redes sociales, que querían de esta manera rechazar la manera en la que el touroperador británico ha gestionado un trágico suceso ocurrido en 2006, cuando dos niños británicos que eran hermanos murieron durante sus vacaciones en la isla griega de Corfú.

Las críticas se han producido tras conocerse que la compañía no se disculpó formalmente ante los padres de los dos niños fallecidos, así como que Thomas Cook recibió de la aseguradora que se encargó de las compensaciones por el accidente una cantidad mayor que la que recibieron los propios padres de los fallecidos.