Díaz Ferrán declaró un patrimonio de 93 millones en 2007 y ahora debe 413

Gerardo Díaz Ferrán, en la declaración de patrimonio que hizo en 2007, y que ha ofrecido La Sexta, reconoció tener unos ingresos de 310.040 euros. En ella constan acciones, cuentas corrientes y sus bienes e inmuebles, y en total sumaban 93.501.326 millones de euros. Ahora el déficit patrimonial del empresario alcanza los 413 millones de euros, ya que, de acuerdo con El País debe 419 millones a 19 entidades bancarias y 28 empresas (la mayoría de servicios) y tan solo posee un patrimonio de 5,6 millones de euros repartido en ocho propiedades inmobiliarias.

Entre los diez primeros acreedores por volumen de deuda figuran algunas de las principales cajas y bancos intervenidos por el Gobierno y salvados con ingentes cantidades de dinero público para evitar su quiebra. Díaz Ferrán adeuda 41,7 millones de euros a Novacaixa Galicia (segundo acreedor entre los 47 que ha señalado la administración concursal); 32,6 millones de euros a Cajamadrid (del grupo Bankia), 10,8 millones de euros a Caja de Ahorros del Meditérraneo y siete millones de euros a Bancaja. Además, el exjefe de la patronal debe 85 millones al Banco Español de Crédito, el primero en la lista de acreedores. Grupos hoteleros como AC, Accor, o NH y agencias de viajes también nutren la relación de acreedores de Díaz Ferrán.

En la declaración que Díaz Ferrán realizó como persona física constan: acciones, cuentas corrientes y sus bienes e inmuebles. El expresidente de la CEOE tenía en propiedad seis viviendas y 35 fincas rústicas, por valor de un millón de euros, y 39.682 euros en sus distintas cuentas corrientes. En total, 93.501.326 millones de euros. Cuatro años después, todo ese patrimonio, con el que había avalado 43 millones de euros en pagarés, había volado y Díaz Ferrán se declaró insolvente.

En junio de 2010, Díaz Ferrán, acosado por las deudas, vendió su patrimonio personal y su grupo empresarial, al experto en liquidación de sociedades Ángel de Cabo por 3.060 euros. Dos años y medio después, fue encarcelado por ocultar bienes en colaboración de Cabo para impedir el pago de las deudas a sus acreedores.